Sunday, May 28, 2006

DE PROFESIÓN: ESTAFADOR

A estas alturas, ya no sé de qué me sorprendo. Pero lo cierto es que últimamente la siempre célebre picaresca española que nos acompaña desde tiempos del Lazarillo está viviendo una época de auge casi sin precedentes. Primero lo del asunto este de los sellos, que nada más verlo se da uno cuenta de que es algo tan surreal y tan desmesurado que sólo puede pasar en España. Sin ir más lejos, en mi oficina ya han surgido como de debajo de las piedras múltiples afectados por la movida filatélica trapezoidal esta, dado que al parecer, uno de los empleados se dedicaba en su tiempo libre a captar clientes para Afinsa, imagino que a comisión, y debió de captar a más de uno y más de dos. Al parecer, justo el día en que saltó la noticia este buen hombre se cogió la baja, por lo que dicen. Un abogado de otro Departamento lo explicaba con claridad meridiana, en nuestro particular Camera Café cotidiano: "Hace bien, si de todos modos se la va a tener que coger de todos modos por las hostias que le van a caer. Imagínate, con todos los afectados que hay, sólo con que le dé cada uno una hostia, ya se va a tener que coger la baja". Y es que no hay nada que tiente más al español que la posibilidad de conseguir DINERO GRATIS, o lo que es lo mismo, ser lo suficientemente espabilao para llevarse más pasta que el pringao de al lado sin dar un palo al agua.


Pero claro que no es lo mismo engañar a un español, que a un guiri que viene aquí a disfrutar de la playa, el sol, la paella y el tinto de verano. Ayer, mientras nos ausentábamos impunemente de un ritual nupcial al que supuestamente estábamos convocados, algunos sujetos de dudosa reputación, como el Diplomaster, el Sultan Abdul Hamid II o quien esto suscribe, entre otros, nos desayunábamos nuestros zuritos y nuestros pinchos de tortilla con esta asombrosa noticia. La cosa, si se para uno a pensarlo, no difiere mucho de lo de los sellos: en vez de montar una red para organizar operaciones inmobiliarias reales, no organizamos nada, robamos el dinero a la gente prometiendo viviendas que no existen, y luego, eso sí, montamos un circo interpretativo de la hostia para intentar justificar tan absurda operación. Parece ser que los afectados, no contentos con ser estafados, volvían a confiar ciegamente en la agencia inmobiliaria y en vez de denunciar los hechos en el Juzgado, lo hacían ante "abogados ficticios" asalariados por la propia empresa. O sea, el auténtico timo de la estampita. Mencionaban viviendas que tenían hasta 100 propietarios distintos, ahí es nada (que como quieran ir todos en julio y agosto a la multipropiedad, pues ya me diréis...).

Hoy, en plena resaca dominical, leo este otro insólito timo. Se acusa a los presuntos estafadores de haber actuado "con ánimo de enriquecerse ilícitamente". Y es que aquí ya no nos sorprende tanto el timo en sí, como el hecho de que a alguien le enseñen un puto trastero y el comprador pueda llegar a considerarlo una vivienda en toda regla y soltar casi 20 kilitos del ala por habitarla. Vamos, que llegamos ya a un punto en el que no evaluamos ya la legitimidad de que una persona time a otra si puede (esto lo damos ya como consustancial a la naturaleza del individuo español), sino que nos centramos más en el atolondramiento y la credulidad del pringao al que le timan.


En un país en el que sigue funcionando el timo de la estampita y la justicia poética del "chasseur chassé", uno siempre esta ávido de este tipo de noticias que pongan en evidencia lo que lleva dentro el genuino y auténtico español. Incluso yo mismo estoy pensando en iniciar una serie de posts dedicados a los grandes timos de la historia, por su alto valor meritorio, más allá del bien y del mal. Puede que precisamente porque todos llevemos en nuestros genes una parte de ese cobrador de Afinsa que se coge la baja de la noche a la mañana, y no podamos evitar que siempre nos sorprenda más la inocencia de algunos que la perspicacia de otros. O dicho de otra manera: que en España lo que gusta es reírse del tonto, y admirar secretamente al espabilao, al listillo y al aprovechao.

6 Comments:

At 3:40 PM, Blogger Shiba said...

Típico, sí, pero no sólo sucede en España... estafas y problemas hay en muchos lados, aunque bien es cierto que en nuestro país eso del Lazarillo aún está de moda, pero tirando a lo grande, y jugando con las ilusiones de un montón de gente.

 
At 5:41 PM, Anonymous Anonymous said...

I say briefly: Best! Useful information. Good job guys.
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At 9:27 PM, Anonymous Anonymous said...

Greets to the webmaster of this wonderful site. Keep working. Thank you.
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At 4:17 PM, Anonymous Anonymous said...

Ya es verdad que hay grandes estafas que salen a la luz, pero también hay pequeños estafadores en todos los rincones de España que hacen sus pequeñas estafas para poder vivir placidamente a cuestas del cidudado de a pie, si mirais en esta página protesta vereis como un ciudadano sin recursos intenta mostrar a la luz a un estafador a pequeña escala, que no por eso deja de serlo. http://xaviergomezteres.blogspot.com/

 
At 3:53 PM, Anonymous Anonymous said...

Looking for information and found it at this great site... » »

 
At 8:07 AM, Anonymous Anonymous said...

My friend and I were recently talking about the prevalence of technology in our day to day lives. Reading this post makes me think back to that debate we had, and just how inseparable from electronics we have all become.

I don't mean this in a bad way, of course! Societal concerns aside... I just hope that as memory gets less expensive, the possibility of copying our brains onto a digital medium becomes a true reality. It's a fantasy that I daydream about every once in a while.

(Submitted from Nintendo DS running [url=http://cid-2602f0e287041cef.spaces.live.com/blog/cns!2602F0E287041CEF!106.entry]R4i[/url] SerVo)

 

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